La OID vs. Loterías

La sociedad no es capaz de agotar su capacidad de sorprender. Cuando crees haberlo superado todo, siempre salta alguna que otra noticia que te hace despertar del dulce sueño de la apatía. Hoy, no cumplidas aún veinticuatro horas de la finalización del más popular sorteo de lotería del año, se descuelga la prensa anunciando que la Organización Impulsora de Discapacitados, ha presentado denuncia ante el Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid contra el Servicio de Loterías del Estado por, asómbrense ustedes, usar menores para cantar los premios del sorteo de lotería de navidad, en referencia a los alumnos del San Ildefonso que, desde Dios sabe cuando, ejercitan como esa especie de privilegio que les da el ser voceros de las ilusiones de algunos.

Falta por ver las reacciones y las conductas de aquellos que deban reaccionar y conducirse de alguna forma en este nuevo despropósito, pero tampoco debería sorprendernos que la progresía reinante condenara a quien corresponda por el “abuso” de los menores que supone su “empleo” en trabajos como el del canto de la lotería de navidad.

A este paso tampoco me extrañaría demasiado que alguna protectora de animales denunciara también por el empleo de Pancho, el gracioso perrillo que acierta la primitiva. Lamento haber dado ideas, pero es que así son las cosas.

¿Nos quedaremos sin oír a los niños de San Ildefonso? Todo es posible. De momento lo que oímos es el canto de los sapos que no tienen otra cosa que hacer que denunciar. Deporte nacional donde los haya.

Publicado por Ferran Martinez i Garcia, el 24 de diciembre de 2009