Despejando, que es gerundio

Por fin se solucionó el entuerto. Cómo podíamos estar meses sin nombrar Senadora por la Comunidad Valenciana a la señorita Pajín. Todo un desatino de estos del PP que no han hecho nada más que marear la perdiz e impedir que doña Leire se alzase con el cargo, ¿prebenda, sinecura, momio…?, de Senadora.

Se habló de que el PP aflojaba la mano y hacia la vista gorda, a cambio de que en Benidorm volviesen las aguas a su cauce. Pero claro, por aquellas tierras ya no está, por desgracia, el ex–conseller García Antón, padre y artífice de todo lo que refiriéndose a aguas ocurra, para bien, por aquellas latitudes. En fin, que doña Leire Pajín ya es senadora, pero el ex alcalde de Benidorm no ha vuelto a coger la vara. Luego eso no es.

Entonces ¿a cuento de qué viene la mirada ladeada del PP para no hacer valer sus cincuenta y seis votos? Porque a cuento (o a cuenta) de algo vendrá. En política nada se hace por que sí y todo está, aunque a veces los resultados lo nieguen, muy bien meditado.

Si de algo me alegro es porque en la foto de la flamante y recién nombrada senadora, aparece un Ángel Luna sonriente, (sonrientísimo, diría un buen amigo). Estamos tan acostumbrados a ver la acritud y amargura reflejados en su rostro que, al verlo de esta guisa, uno piensa que debe haber sido muy importante esto del nombramiento. Y yo que creía que lo de ser senador no tenía tanta importancia. Seré ignorante. En fin, señor Luna, deseo que le dure a usted esta sonrisa, para nuestra complacencia.

Bien. Y ahora qué. Que nuevas metas, empresas, objetivos… se le señalan desde Madrid a la señorita Pajín. Nunca sabemos el futuro que nos depara, pero tratándose de quién se trata, no creo que sea nada bueno. ¿Qué político valenciano, del PSOE, estará poniendo sus barbas a remojo? (a lo peor no tiene barba), porque alguien caerá… y si no al tiempo.

Una última cuestión que sería saludable fuera despejada por nuestra rutilante senadora estaría en relación con el sueldo que como tal va a percibir. ¿Se añadirá a los que ya perciba o se compensará con algunos de ellos? Lo digo porque si lo sabemos, pues como que tendremos un poco más de envidia de los inteligentes que son algunos y de lo zopencos que somos la mayoría. Paciencia que no hay mal que cien años dure.

Publicado por Ferran Martinez i Garcia, el 26 de noviembre de 2009

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